La Guardia Civil abandona la prevención en el medio rural: “pensé que el SEPRONA había desaparecido, ya no se os ve con las motos”

En las últimas semanas se están aconteciendo numerosos Incendios Forestales en España y más concretamente en el noroeste de la península. Según las informaciones de los medios de comunicación, un alto porcentaje (superior al 80%) son provocados por la acción humana.

Como bien es sabido, dentro de la Guardia Civil, el Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA), tiene entre sus cometidos la vigilancia de Incendios Forestales.

Perdida de efectivos de las unidades del SEPRONA

Desde hace aproximadamente 10 años hasta la actualidad, el SEPRONA de la Guardia Civil viene viviendo una profunda restructuración. Esto ha llevado a que en unidades de la especialidad como las patrullas PAPRONA y PACPRONA exista una merma considerable de personal, llegando a estar muchas de ellas sin ningún componente, otras con un componente y otras con dos, lo que conlleva tener, en el mejor de los casos, solo un turno de servicio por día y muchos días sin ningún tipo de servicio de SEPRONA. A esto hay que añadir unas demarcaciones muy extensas, al menos de una compañía de territorial, pero hay unidades que abarcan dos y hasta tres compañías.  

Además, los pocos efectivos que quedan actualmente son utilizados en muchas ocasiones para realizar, o bien Ordenes de Servicio diseñadas desde la Jefatura del SEPRONA , o en algunas ocasiones, servicios de seguridad ciudadana en apoyo a este cometido.

Esas Órdenes de Servicio diseñadas para el ámbito nacional, en muchas ocasiones difieren de la realidad de las unidades, donde no encajan esos cometidos, privando a los pocos efectivos disponibles de realizar las tareas medioambientales que son realmente importantes en la demarcación.

La débil prevención de la Guardia Civil en el mundo rural; “pensé que el SEPRONA había desaparecido, ya no se os ve con las motos”

En los últimos años, se ha dejado de lado claramente la prevención que realiza la Guardia Civil en el mundo rural, como puede ser la vigilancia de la caza, pesca, cauces, bosques, o, en este caso, los incendios forestales.

Baste un ejemplo de un miembro del SEPRONA a quien una persona de unos 50 años, dijo recientemente “pensé que el SEPRONA había desaparecido, ya no se os ve con las motos”. Esta desaparición del mundo rural de una especialidad tan vinculada a este medio puede llevar a que los delitos e infracciones contra el medio ambiente puedan ser cometidos con cierta impunidad.

Por otra parte, desde hace unos años, la Guardia Civil ha dejado de autorizar las comisiones de servicio de prevención de Incendios forestales que se venían aprobando en la época estival en las zonas de mayor riesgo, lo que conlleva sin duda, que la presencia de las patrullas del SEPRONA en esos cometidos ha quedado muy limitada, actuando los incendiarios con total impunidad.

Desde ASESGC abogamos por unas unidades del SEPRONA con mayor número de efectivos, al menos 6 o 7 componentes y con dos mandos en la unidad, Suboficial y cabo. Estas unidades con mayor potencial de servicio, permitirían optimizar los recursos, abarcar mayor demarcación y mayores franjas horarias de vigilancia durante más días.

Además, se debería permitir una mayor autonomía a los mandos de esas Unidades, para una prevención más eficiente, ya que estos son los mayores conocedores de su demarcación. 

Mientras tanto, la Guardia Civil solo está preocupada de vender mediáticamente la foto o un reportaje de una especialidad que agoniza, como los bosques bajo las llamas.