La limitada implantación del régimen de servicio a turnos genera una Guardia Civil de dos velocidades
• El régimen de turnos mejora notablemente la conciliación de la vida laboral y familiar.
• Sólo afectará al 5% de la Institución debido a la escasa entidad de las unidades.
• No se plantean agrupaciones funcionales para ampliar la cobertura a todas las unidades de seguridad ciudadana.
• ASESGC pide una compensación para todo el personal que quede fuera del régimen de turnos.
El régimen de turnos mejora notablemente la conciliación de la vida laboral y familiar, se disfruta de más días libres y respeta escrupulosamente la equidad en el nombramiento del servicio, así lo ha manifestado la propia Dirección General del Cuerpo a raíz de una encuesta realizada entre el personal que presta servicio en esta modalidad. Tal es así, que el 90% de los guardias civiles lo prefieren a cualquier otra modalidad de servicio.
El 1 de junio de 2022 habrá 2200 efectivos en la Guardia Civil prestando servicio en esta modalidad, la mitad de ellos distribuidos en unidades de protección y seguridad como núcleos de servicio y centros penitenciarios y en unidades fiscales y de fronteras aeroportuarias, el resto en puestos principales, todas ellas con más de 40 efectivos.
La incorporación progresiva de 27 nuevas unidades, hasta junio del año 2023, supondrá que un total de 3000 efectivos entren dentro del club de los turnos, con importantes beneficios en conciliación, descansos y régimen de jornada y horario.
Implantación muy limitada
El 90% de las unidades de seguridad ciudadana de la Guardia Civil tienen menos de 40 efectivos, en ellas prestan servicio el 85% de los integrantes del Cuerpo. Todos ellos se quedan fuera del régimen de turnos, convirtiendo este sistema en algo excepcional cuando debería ser exactamente lo contrario.
Por otra parte, en la Agrupación de Tráfico existen serias dificultades para su implantación debido a la concentración de servicios en determinados turnos, que requiere del apoyo de unidades limítrofes, según asegura la cúpula de la Institución.
En el año 2014 la Guardia Civil se comprometió por una orden general a implantar y regular un sistema de turnos dentro de la Guardia Civil, 8 años después no hay avances significativos y los que anuncia María Gámez por la presión de las asociaciones profesionales no llegan a la gran mayoría de la Institución, generando una discriminación indirecta.
La solución a la desigualdad, las agrupaciones funcionales
Ante esta realidad, falta la decisión necesaria en la cúpula del Cuerpo, que teme los avances en la Guardia Civil, por eso no se plantea realizar agrupaciones funcionales en los puestos de seguridad ciudadana que permitan ampliar la cobertura del régimen de turnos a la gran mayoría de las unidades, haciendo iguales a todos los guardias civiles, tal y como ha propuesto la asociación de mandos intermedios ASESGC.
La Guardia Civil argumenta que por esta vía se produciría una reorganización territorial encubierta de la Guardia Civil y eso no está sobre la mesa. Una excusa más para no avanzar en la conciliación laboral y familiar y modernizar el Cuerpo, pues de lo que se trata es de agruparse virtualmente para aumentar las capacidades operativas que permitan hacer turnos, no de romper el despliegue territorial.
Sin embargo, los hechos desmienten el razonamiento de la Benemérita. Algunas unidades de seguridad ciudadana a nivel compañía y comandancia ya están agrupando a sus unidades territoriales dependientes y trabajando por su cuenta con pseudoturnos, empleando incluso las mismas cadencias que ha puesto en marcha la Dirección General, sin que estén monitorizadas por el Estado Mayor y sin que se haya modificado la normativa de jornada y horario.
Menos horas de trabajo y mejores condiciones en la prestación del servicio, colocan a las unidades del Cuerpo donde se trabaja a turnos en la línea de la alta velocidad, generando una Guardia Civil desigual de dos velocidades, incluso entre el personal que realiza las mismas funciones.
En efecto, todo el personal del régimen general que se encuentre destinado en unidades con menos de 40 efectivos (el 90% de la Guardia Civil), quedará por estrictas cuestiones numéricas fuera del régimen de turnos, cuando hay otras soluciones. A estos hay que añadir todo el personal de las especialidades y los del régimen de mandos que además realizan una jornada de 40 horas, totalmente anormal en la administración.
Por ello, ASESGC va a exigir la extensión del régimen de turnos a todas las unidades de seguridad ciudadana, una regulación completa que genere seguridad jurídica y, en su caso, una compensación tanto al personal destinado en las unidades del régimen general que vayan a quedar fuera del régimen de turnos como al personal integrado en los regímenes de servicio especiales o que realicen una jornada de 40 horas.
Normas de participación
Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.
La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad
Normas de Participación
Política de privacidad
Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.121